Inversiones de impacto: La responsabilidad sociambiental puede ser rentable

por Alejandra Granillo

En los últimos años, como consecuencia a los diversos cambios sociales, políticos y ambientales que estamos viviendo, la deconstrucción de creencias y el mayor análisis de nuestro entorno, el gobierno, los emprendedores, las empresas y las organizaciones muestran cada vez más interés en un término que ha ido cobrando más fuerza: inversiones de impacto.

El Pacto Mundial de las Naciones Unidas define las inversiones de impacto como “la colocación de capital en empresas sociales y otras estructuras con la intención de crear beneficios sociales y medioambientales más allá del rendimiento financiero”.

Constantemente, tanto los inversionistas minoristas como los gestores de fondos apuestan por productos y/o servicios que además de ser rentables, prometen un aporte significativo para crear soluciones para el mundo actual. Las inversiones de impacto repercuten directamente en que el impacto social o ambiental del proyecto sea medible, positivo y transparente. Teniendo a favor la intencionalidad, ya que su  objetivo principal es generar valor social yendo de la mano con el beneficio financiero.

Global Impact Investing Network (GIIN) considera este tipo de inversión como una de las clases de inversión más avanzadas, que busca la generación de retorno económico, social o ambiental al mismo tiempo.

La Inversión de Impacto en México

En estos últimos años, diversos países han creado organizaciones dedicadas al estudio y desarrollo de las inversiones de impacto. En México en el año 2015 nació la Alianza por la Inversión de Impacto en México (AIIMx), la cual es liderada por New Ventures Group, SVX México, Compromiso Social Citibanamex, Promotora Social México, ANDE, y otras organizaciones clave; cuyo objetivo es impulsar y fortalecer el ecosistema de inversión de impacto en México y al mismo tiempo, sumar a nivel internacional la visión, perspectivas y reflexiones mexicanas sobre el sector, como parte de la red global del Global Social Impact Investment Steering Group.

En América Latina se ha visto de manera notoria el crecimiento exponencial de hasta 12 veces en los últimos años, siendo un escenario factible para las inversiones de capital, creando un ecosistema de inversión seguro para inversionistas y emprendedores que apuestan por proyectos sociales.

¿Cómo saber que una inversión es de impacto? 

Básicamente, este tipo de inversión afronta problemas ambientales y sociales de diferente índole, como la agricultura sostenible, atención médica accesible, desafíos del cambio climático y otros temas importantes que, al no ser atendidas, reducen la calidad de vida y la igualdad entre la población. 

La AIIMx consolidó un reporte donde los principales resultados del análisis fueron la definición de 3 características clave en las inversiones de impacto: 

  • Intencionalidad de generar un impacto social o medioambiental a través de objetivos específicos. Esta característica que está íntimamente relacionada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) creados por las Naciones Unidas en el año 2015, con el propósito de describir y cuantificar las necesidades sociales y medioambientales que deben ser resueltas en los próximos 15 años.
  • Medición de este impacto, por medio de métricas de desempeño relacionadas con los objetivos de impacto, que se monitorean y gestionan para evitar que las acciones de las empresas no sean de acuerdo a lo establecido en el proyecto haciendo “green washing”, es decir, generando una impresión falsa o proporcionando información engañosa sobre sus prácticas e impacto positivo en el medio ambiente, a favor del beneficio de su imagen corporativa.
  • Rentabilidad financiera, puede variar desde los rendimientos por debajo del mercado hasta los valores promedio de un mercado competitivo, siendo cuestionadas por el hecho de tener una rentabilidad que compita con las inversiones tradicionales, relacionándolo en un inicio directamente con la filantropía. Con el paso del tiempo, varios estudios han comprobado que las inversiones de impacto pueden tener igual o aún mayor rendimiento financiero que las inversiones tradicionales e incluso una mayor resiliencia en entornos negativos, como lo es actualmente la pandemia del COVID-19.

Las oportunidades de la pandemia del COVID 19 y las inversiones de impacto 

La pandemia del COVID 19, nos ha puesto en jaque a muchas industrias, pudimos darnos cuenta que nuestro sistema de salud tiene muchas áreas de oportunidad, que algunas empresas que a pesar de predicar con una bandera de innovación tampoco estaban tan listas para salir de la operación tradicional y también que falta muchísimo más por hacer. 

Esta situación ha puesto las cartas sobre la mesa para priorizar las inversiones de impacto como principal manera de inversión con el fin de desarrollar negocios, estrategias y políticas que fomenten de manera innovadora el crecimiento social y medioambiental.

Ejemplos para demostrar que hay oportunidades de soluciones hay muchísimos, pero uno que vale la pena mencionar es la educación, las escuela tuvieron que mover sus clases a modalidad on line, haciendo que tanto alumnos como maestros se adaptaran a la nueva forma de aprendizaje y enseñanza, sin embargo ¿cuántos estudiantes tuvieron que dejar la escuela por no tener la infraestructura para continuar con sus clases en línea?, ¿cuántos de ellos tuvieron que desertar por problemas económicos?

Según estadísticas del INEGI 2021, al menos 5 millones de estudiantes no se inscribieron al ciclo escolar 2021-2022 por falta de recursos económicos y porque no contaban con un equipo ni internet que les permitiera tomar sus clases en línea. Con esto, claramente vemos que la pandemia nos ha manifestado la necesidad de que las inversiones privadas den vuelta hacia las áreas que no estaban siendo vistas y que son de gran importancia para el país. 

En un futuro cercano se espera que los acuerdos entre empresas y el gobierno vayan en mayor número para generar proyectos y estrategias que intervengan en el desarrollo del país.

Fuente: Desmitificando las inversiones de impacto – Deloitte

En la actualidad, se sigue considerando que los impactos positivos y la rentabilidad no van de la mano, sin embargo en Shared Value Consultores apostamos por proyectos que tengan impacto en distintos sectores y se generen soluciones para el desarrollo del país. Brindamos acompañamiento a empresas, emprendedores y organizaciones de la sociedad civil en el proceso de generación de estrategias y búsqueda de inversionistas que al igual que tú estén convencidas de que invirtiendo en tu proyecto se obtendrá más que un beneficio económico. Si quieres conocer más de nuestros servicios, escríbenos a contacto@sharedvalue.com.mx